Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de agosto, 2015

NO HAY NADA QUE HACER...

"Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo"  Tal vez pocas frases dan tanto juego para filosofar, especular, o, simplemente, pensar y escribir. Parece que es una frase de Einstein. Ese hombre que formuló (no descubrió en sentido literal), la teoría de la relatividad. Seguramente el universo ya era relativo, y la luz se combaba al paso próximo a un sólido…, pero alguien lo tenía que formular. Algo parecido se podría decir del teorema de Pitágoras. Seguramente el universo, o algo más modesto, como la tierra, ya estaban llenas de catetos e hipotenusas, antes de la llegada de Pitágoras. Puede que alguien se ofendiera, molestara, y mostrara su sorpresa, cuando Pitágoras o Einstein hicieron su formulación…: -           No te jode Pitágoras, ¿y eso lo has descubierto un 25 de agosto?... No es fácil seguir creyendo en la posibilidad de cambiar cosas complejas cuando el mundo juega a la contra y tú mismo te haces mayor, o directamente viejo.

El PP Y EL TREN (O papá ven en tren, antes de que nos lo quiten claro...)

No es novedoso que los políticos españoles quieran acabar con un modelo de ferrocarril público para todos los ciudadanos. Directamente es que creo que ningún político de los que el PPSOE ha puesto a gestionar el ferrocarril desde que recuperamos la democracia en España, se ha planteado realmente (más allá de declaraciones electoralistas), esa necesidad ni esa utilidad. Simplemente, han hecho política partidista con lo que es un patrimonio de todos los ciudadanos. Tristemente, tal vez esa mayoría ciudadana ni valora, ni cree necesario defender ese patrimonio público ferroviario. Tal vez ese sea un problema que da para otro análisis, sobre el modelo de desarrollo y los valores que inculca el sistema educativo hiperpolitizado.    Los mejores ferrocarriles del mundo que conozco (incluidos algunos de gestión privada o compartida), se encuentran en países donde lo público se respeta, se valora y se usa por una ciudadanía educada y culta, que exige a sus políticos una buena gestión de es