El blog de Garcia

Cada día nos levantamos con la posibilidad de hacerlo todo nuevo. Al igual que el Hacedor universal , somos dueños de nuestra vida, de nuestro destino, pero no nos lo creemos. O, tal vez, no nos lo queremos creer.   ------------------------------------------------------------   Aprendí con mi padre, de manera natural, tal y como respiramos, el arte de hacer cada día algo nuevo, aunque pareciera siempre lo mismo. Hacer una masa, fermentarla cada día, con parte de la masa madre del día anterior -o sin ella-, era un ejercicio de creación que te colocaba en la posición de crear vida nueva, sin apenas ser consciente de ello en mi corta edad.   En las madrugadas del tórrido verano, del templado otoño, del frío invierno o la incierta primavera, la masa cobraba vida nueva, a su ritmo, con su temperatura, su cadencia y su pausa. Nos acompañaban la radio, el sonido rítmico de la amasadora, el crepitar del horno, la incierta luz de la madrugada, la alborada, el amanecer, y algún gato..

Tengo tanta energía recorriendo mis venas que no puedo entender a los inmovilistas, a los carcas, y a toda esa caterva de fósiles que, conformismo en mano, siguen permitiendo que los orcos nos gobiernen ya tantísimos años.       Pero hoy empieza un nuevo tiempo para España. Lo sé. Y tengo un entusiasmo guardado que casi me duele, que me pincha el alma de emoción. Porque creo que hemos aguantado como sociedad, casi más de lo que es exigible a los héroes.   Voy a soñar por un rato, y voy a creer que Podemos gana las elecciones.   Como las ganó el PSOE en el año 82. Cuando hubo tanta gente sorprendida, incluido el comunismo perplejo, y el embajador de USA. No voy a valorar lo justo o injusto que fue aquello con los que habían combatido la horrorosa dictadura. Constato el hecho solamente.   Y además, como es mi sueño, sueño lo que me da la gana. Y en mi sueño gana por mayoría simple, para que ni siquiera pueda tener la tentación de tirar de real decreto, como Clint E